viernes, 14 de febrero de 2020

Repoblación Forestal 7 de Marzo

Este 7 de marzo, nos vamos a plantar vida en saludo al Día Internacional de la Mujer♀.

Vamos a celebrar los logros alcanzados en la lucha por la igualdad de género, disfrutando de la naturaleza y a la vez devolviéndole a la tierra lo que es suyo: el bosque. 🌳🌳🌳🌳. En este nueva actividad realizaremos una ruta circular de senderismo: La Palmita- Lomo del Manco- Las Candelarias. Ruta de nivel fácil y al alcance de toda la familia.
Con tu colaboración vamos a cumplir el sueño de ver reforestada la cuenca de Guayedra con especies propias de la zona y a disfrutar de un magnífico entorno, al mismo tiempo, se podrá comprobar la evolución de las plantaciones realizadas en los últimos tiempos.
Después de un refrigerio, que cada participante deberá llevar, se regresará a Agaete por el Barranco del Moro y tendrá lugar una visita guiada e interpretada del Ingenio Azucarero de Agaete, uno de los últimos y más importantes yacimientos arqueológicos de Gran Canaria que servirá para conocer la historia de nuestra isla y en particular del Agaete de hace 500 años.
Está previsto que el evento acabe sobre las 15:00 horas en Agaete.
🕰El punto de encuentro será el sábado 7 de marzo a las 08:40 horas en La Palmita (Agaete). A dicha hora será la inscripción de l@s participantes en la actividad y se iniciará la ruta de senderismo a las 9:00 horas. L@s asistentes no deben olvidar llevar calzado y ropa adecuada, una gorra o sombrero, agua, algo de comida (bocadillo, frutos secos…), ganas de pasarlo bien y disfrutar de la naturaleza.😍.

Esta actividad coordinada por la Asociación Bioagaete Cultural Solidario y el proyecto Redondo de Guayedra de la empresa Costa Tamadaba, cuenta con la colaboración del Club Deportivo Agaeterun y la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria.

3 comentarios:

Antonio dijo...

En primer lugar, me gustaría alabar las iniciativas como estas que pretenden mejorar nuestra naturaleza. Sin embargo, a veces estas actividades medioambientales que persiguen buenas intenciones provocan daños al medio natural. Este sábado día 22 de febrero estuve por la zona donde se realizaron las plantaciones (Lomo del Manco), y como especialista en biogeografía y, concretamente, en el estudio de la vegetación canaria, considero que no son adecuadas por varios motivos:
1) Se localizan a una altitud de unos 300 m. o inferior, totalmente inadecuado para las especies de árboles termófilas (acebuches, sabinas…) empleados en las plantaciones. Los estudios bioclimáticos realizados (consultar el mapa de vegetación de Canarias) indican que en esta zona el bosque termófilo debió ubicarse a altitudes superiores a los 400 m;
2) Las plantaciones se están realizando en tabaibales dulces, es decir, una comunidad vegetal climácica que está en consonancia con las condiciones climáticas áridas de esta zona baja;
3) Los tabaibales dulces forman parte del hábitat de interés comunitario 5330, sobre los cuales las leyes nacionales de protección de la naturaleza y la biodiversidad no permiten alteraciones. Plantar especies que no forman parte de este hábitat, aún siendo autóctonas como acebuches, sabinas, etc., es una forma de alteración del mismo;
4) Aun suponiendo que estas especies fueran adecuadas para las cotas altitudinales donde se están plantando, los modelos actuales de dinámica de la vegetación en respuesta al cambio climático indican que las especies termófilas tenderán a ascender en altitud conforme se aridifica áun más el clima de Canarias, siendo los tabaibales dulces y cardonales las comunidades que estarán mejor adaptadas a este cambio climático.

Por todo ello, desde mi punto de vista se deberían buscar localizaciones altitudinales más adecuadas para la recuperación del bosque termófilo de la cuenca de Guayedra, basándose para ello en estudios científicos ya existentes (por ejemplo, el ya citado mapa de vegetación de Canarias), que deberían servir para que la recuperación y gestión del medio natural se realice de forma adecuada. En todo caso, sería más coherente realizar plantaciones en zonas que estén degradadas (ocupadas por vegetación exótica como Pennisetum setaceum, matorrales de sustitución, etc., de manera que no se perjudicara a otros tipos de comunidades vegetales naturales y propias de la zona, como los tabaibales dulces que contienen una gran biodiversidad.

Antonio I. Hernández Cordero
Licenciado y Doctor en Geografía
Profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria

Alejandro Armas dijo...

Respecto a los comentarios vertidos por Antonio Hernández en este blog de Repoblación Forestal (7 de Marzo) me veo obligado a hacer las siguientes puntualizaciones:

Resulta poco científico por parte de un especialista hacer ciertas declaraciones alarmantes sin contar con información suficiente, acto impropio de una mentalidad científica.

Debo advertir que con una visita a la zona de plantación es muy precipitado realizar las afirmaciones descalificadoras, hacia los criterios de reforestación determinados por el Servicio de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria basados en proyectos aprobados, estudios específicos y en la experiencia forestal de sus técnicos, realizadas por un autoproclamado especialista.

Las plantaciones de termófilo realizadas en el Lomo del Manco son solo la zona inferior de las realizadas, siendo este su límite inferior. En esta cota de 300 metros se está abordando la regeneración de la vegetación creando una zona ecotónica en lo que fueron anteriormente cultivos de secano de cereal -posiblemente trigo como se deduce de la presencia de varias eras localizadas en su entorno-.

El tabaibal casi monoespecífico que observamos actualmente es solo una facie de matorral de sustitución que ha prosperado como vanguardia en el proceso de recolonización de estas zonas antes cultivadas.

Este matorral presenta en sus cotas más bajas una densidad moderada o alta, que disminuye según progresa en altitud, hasta esta zona, en torno a los 300 metros de altitud, donde se ralentiza su expansión y presenta grandes superficies totalmente desnudas. Aunque como criterio general se podría considerar una cota relativamente baja para ciertas especies de termófilo, un especialista debe saber que las circunstancias específicas del suelo, el microclima o la exposición hacen variar significativamente la distribución paradigmática de la vegetación.

Estas zonas desnudas han sido repobladas con almácigos, que en la cuenca de Guayedra se localizan de forma natural desde la cota de 60 metros, de acebuches que también se localizan de forma natural en la zona de la cuenca de Guayedra desde los 100 metros de altitud y sabina que también se desarrollan a estas altitudes en diversas localizaciones de la isla, como se aprecia en la toponimia como en El Sabinal -próximo a Tafira- que se encuentra a 300 metros de altitud.

Continúa en el siguiente comentario.

Alejandro Armas dijo...

En la zona del Lomo del Manco se están plantando también cientos de tabaibas y cardones para potenciar el hábitat de interés comunitario 5330, que seguramente le pasaron desapercibidos porque estas especies no se plantan con protectores de plástico como los plantones de termófilo, ya que no son víctimas de las cabras asilvetradas, y por tanto aparentan ser plantas brotadas de forma natural, aunque un profesional debería haber advertido su presencia, por su distribución y por la homogeneidad de talla.

En esta zona baja de las plantaciones, se está intentando reintroducir estas especies vegetales con intención regenerar la zona ecotónica entre el cardonal-tabaibal y el bosque/ matorral termófilo, siendo las especies utilizadas propias de ambos tipos de hábitat.

La estrategia del proyecto de regeneración vegetal de la cuenca de Guayedra tiene entre sus objetivos principales combatir a las especies invasoras, principalmente el Pennisetum setaceum y tuneras, de las que ya han sido eliminadas grandes rodales donde ahora se localizan algunas de nuestras plantaciones. Además de acoger parcelas experimentales delimitadas para controlar la población Pennisetum y localizaciones donde se está poniendo a prueba modos alternativos de plantación en colaboración con proyectos LIFE del Cabildo. Todo ello con el esfuerzo de voluntarios y con recursos privados.

Todos estos criterios han sido contrastados por auténticos especialistas, desde la perspectiva biogeográfica, considerando las condiciones específicas del microclima local, los suelos y las referencias históricas y etnográficas-.

En cotas superiores se están haciendo plantaciones con otra composición más variada de especies termofilas acorte con sus zonas potencialmente climácicas -hasta 700 metros de altitud-, hasta donde por lo visto no llegó la visita de Antonio.

Por lo expuesto parece totalmente inadecuado que el autoproclamado especialista utilice expresiones alarmistas como "provocan daños al medio natural", y descalificaciones que se basan más en problemas de rivalidad profesional que en criterios científicos objetivos.

Desde aquí invito a Antonio a que participe en la jornada de repoblación del próximo día 7 de marzo y quizá tenga la oportunidad de contrastar lo expuesto.

Alejandro García García. Geógrafo.